Las causas más comunes por las que se pueden atascar los desagües y tuberías en los hogares son las deficiencias en la instalación de fontanería, las raíces de los jardines o el sedimento provocado por el uso de jabón en las lavadoras y lavavajillas.

Siete claves para evitar obstrucciones

Verter la grasa en recipientes y llevarla a un punto limpio: Si se tira la grasa al fregadero, puede acumularse a los lados de la tubería y las partículas de la comida se pegan a él, lo que acarreará obstrucciones futuras. Verter una olla de agua hirviendo por la tubería una vez por semana, para fundir la grasa acumulada.

No hay que arrojar sustancias químicas como pintura o disolventes, ni verter cera caliente o sustancias similares

Verter periódicamente media taza de levadura química y media de vinagre blanco: Si las tuberías se obstruyen con frecuencia, tapar el desagüe y dejar que la mezcla se asiente durante unos minutos. Después, empujar la mezcla por el desagüe con una olla de agua hirviendo, que diluirá las grasas y dará un olor fresco.

Limpiar los tapones de los baños periódicamente: A menudo, los pelos se acumulan ahí y causan obstrucciones.

No tirar nunca papeles no degradables al inodoro: El exceso de papel puede obstruir la taza e incluso el drenaje entero.

No arrojar nunca sustancias químicas como pintura o disolventes por las tuberías, ni verter cera caliente u otras sustancias similares.

En caso de contar con triturador de alimentos, utilizarlo para tirar restos de comida. Después, se debe hacer correr mucha agua fría para empujar las partículas por las tuberías. Si se usa poca agua, se podrían acumular más partículas en los lados interiores del tubo.

Precaución con las canalizaciones exteriores

Además del agua, los canalones recogerán también restos más voluminosos como musgo o tierra

Además de las tuberías, la mala conservación de los canalones impide realizar la recogida del agua de lluvia. Además del agua, debemos tener presente que recogerá también todo lo que haya en el tejado: musgo, polvo, tierra, pero también restos más voluminosos, desde pajarillos muertos a bolsas de plástico y las hojas de los árboles, el mayor causante de atascos.

El mantenimiento normal de los canalones se reduce a la limpieza preventiva en otoño y primavera, adelantándose a las fuertes lluvias. También es aconsejable instalar un salvahojas, que evitará la entrada de materiales en las bajantes, y también su obturación.